La hidráulica es la ciencia que utiliza de materia prima el aceite para producir acciones o respuestas. La hidráulica es la ciencia que ha estado permanentemente en contacto con la humanidad. Primeras aplicaciones técnicas van desde el simple arrastre de troncos por el caudal del río, pasando por la rueda hidráulica que tuvo una gran difusión en la antigua Roma.
De hecho, la primera descripción de una rueda hidráulica en Occidente es obra del ingeniero romano Vitruvio. Posteriormente se siguieron empleando, y aún se conservan algunas en nuestra época.

Tras estas primeras aplicaciones de un sistema hidráulico como elemento productor de energía, en la maquinaria de la industria moderna tiene una gran difusión como elemento de transmisión de esta energía, tanto para pequeños como grandes esfuerzos o amplias variaciones de velocidad. De hecho, la industria del automóvil ha introducido el sistema de freno hidráulico, cuyo principio de funcionamiento fue ideado en 1851 por el astrónomo británico George Biddell Airv, correspondiendo al alemán Hugo Mayer la creación de los primeros frenos hidráulicos para automóviles en 1895, si bien la comercialización de este equipo la realizaría más tarde el estadounidense Malcolm Lockheed. Otra aplicación posterior para la industria de automación ha sido la dirección hidráulica que ha facilitado notablemente el manejo de la dirección con el volante.

Ventajas:
1ª.- Reducen el esfuerzo en el volante, con menor fatiga para el conductor, ventaja muy conveniente en los largos recorridos o para las maniobras en ciudad.
2ª.- Permiten acoplar una dirección mas directa; es decir, con una menor reducción con lo que se obtiene una mayor rapidez de giro en las ruedas. Esto resulta especialmente adecuado en los camiones y autocares.
3ª.- En el caso de reventón del neumático, extraordinariamente grave en las ruedas directrices, estos mecanismos corrigen instantáneamente la dirección, actuando automáticamente sobre las ruedas en sentido contrario al que el neumático reventado haría girar al vehículo.
4ª No presentan complicaciones en el montaje, son de fácil aplicación a cualquier vehículo y no afectan a la geometría de la dirección.
5ª.- Permiten realizar las maniobras mas delicadas y sensibles que el conductor precise, desde la posición de paro a la máxima velocidad. La capacidad de retorno de las ruedas, al final del viraje, es como la de un vehículo sin servodirección.
6ª.- En caso de avería en el circuito de asistencia, el conductor puede continuar conduciendo en las mismas condiciones de un vehículo sin servodirección, ya que las ruedas continúan unidas mecánicamente al volante aunque, naturalmente, tenga que realizar mayor esfuerzo en el mismo.
Inconvenientes:
Los inconvenientes de estos mecanismos con respecto a las direcciones simples con prácticamente nulos ya que, debido a su simplicidad y robustez, no requieren un entretenimiento especial y no tienen prácticamente averías. Por tanto los únicos inconvenientes a destacar son:
1ª.- Un costo mas elevado en las reparaciones, ya que requieren mano de obra especializada.
2ª.- El costo mas elevado de este mecanismo y su adaptación inicial en el vehículo, con respecto a la dirección simple

Con el desarrollo industrial, el empleo del flujo hidráulico como elemento de accionamiento y gobierno de máquinas sustituye, con ventaja, a una serie de órganos mecánicos convencionales tales como: palancas, árboles de transmisión, husillos de avance, engranajes, etc.; de tal manera que se reducen problemas de desgaste y mantenimiento, además de estar exentos de vibraciones y ser muy fácil la regulación de velocidad.

El fluido que se utiliza en esta hidráulica industrial es el aceite proveniente de la destilación del petróleo, por lo que sería más propio denominar esta rama con el sustantivo de óleo-hidráulica. No obstante, mantendremos el nombre inicial que se asocia, en sentido amplio, con el empleo y características de los líquidos.
Los conocimientos científicos de la rama de la hidráulica que ahora nos concierne comenzaron a desarrollarse en el siglo XVII, basándose en el principio descubierto por el científico francés Blaise Pascal, según el cual un fluido confinado puede transmitir energía multiplicando la fuerza y modificando el desplazamiento.

Presión De Vapor
La evaporación de los líquidos se produce porque sus moléculas escapan de su superficie. Si cerramos al líquido en un espacio, las moléculas del vapor generado ejercen una presión parcial en dicho espacio que se denomina presión de vapor.

En el equilibrio, el número de moléculas que salen del líquido en forma de vapor coincide con las que se condensan. Este hecho depende solamente de la temperatura. Si, por alguna circunstancia, la presión alrededor del líquido coincide con la de vapor, dicho líquido hierve. Así, el agua tiene una presión de vapor de 0,0238 kp/cm2, por lo que si a temperatura ambiente disminuye la presión suficientemente, el agua hervirá.
Puede suceder que en el movimiento de líquidos se produzcan presiones muy bajas en algunos lugares. Si esta presión es menor o igual que la de vapor, el líquido se transforma en vapor, y se forman bolsas de vapor que se retiran de su zona de origen y se convierten de nuevo en líquido. Este es el fenómeno de la cavitación, y tiene como consecuencia la erosión de las partes metálicas de bombas y turbinas.
Viscosidad
Atribuimos la viscosidad al frotamiento interior entre las moléculas de un fluido. Sería, de alguna forma, equivalente al rozamiento entre sólidos, y representa una medida de la resistencia del fluido a su movimiento.
Así, si un fluido circula fácilmente decimos que la viscosidad es baja (el agua es un líquido poco viscoso). Por el contrario, si el fluido circula con dificultad, tendrá una viscosidad alta (el alquitrán es un fluido muy viscoso). En el caso de los líquidos la viscosidad disminuye con la temperatura.
Una viscosidad elevada seria deseable pues así se mantendría la estanqueidad en los cierres y racores, pero si fuera excesiva, tendríamos una alta fricción con lo que aumentaría la potencia consumida, y las burbujas de aire serían difíciles de separar, pudiendo hacerse más lento el funcionamiento del sistema.
En Física, la viscosidad se define como aquella propiedad de 105 fluidos que determina la cantidad de resistencia opuesta a las fuerzas cortantes, o la resistencia que ofrece una capa de fluido al circular sobre otra.
La ley de Newton, que nos permitirá evaluar la viscosidad, afirma, entre, otras definiciones, que la tensión unitaria cortante es proporcional a la velocidad de deformación.
En efecto, si tomamos dos placas planas paralelas separadas una distancia, con el espacio entre ellas lleno de fluido, y suponiendo que la placa superior se mueve con velocidad constante al actuar sobre ella una fuerza también constante, el fluido en contacto con la placa móvil se adhiere a ella moviéndose a su misma velocidad, mientras que el fluido en contacto con la placa fija permanecerá en reposo. La variación de velocidades, son pequeñas, podrá representarse por una línea recta.
A pesar de la definición física, esta propiedad tan importante, sobre todo cuando el fluido es aceite, se mide en Europa en grados Engler, en Inglaterra en segundos Redwood, y en los Estados Unidos en segundos Saybolt (SSU, segundos Saybolt universal).
Debido a que la viscosidad de los aceites se modifica con la temperatura, generalmente se efectúan dichas mediciones a 20, 50 Y 100 O (según sean Aceites ligeros, de máquina o de cilindros, denotando las viscosidades así obtenidas en grados Engler por P20, Pso o PIOO.
Como se ha comentado, la viscosidad es una característica de los aceites que varía ampliamente con la temperatura. Así, un aceite muy viscoso a temperatura ambiente se puede comportar como un aceite poco viscoso cuando la temperatura aumenta. Para paliar en parte este fenómeno se añaden aditivos de forma que un aceite se comporte a temperatura ambiente como poco viscoso, pero que a elevada temperatura lo haga como un aceite que hubiera sido más viscoso a dicha temperatura ambiente. Con ello se consigue que a alta temperatura le corresponda más viscosidad.

Índice De Viscosidad
Sabemos que los aceites minerales son unos derivados de los productos petrolíferos y que éstos se extraen de muchas partes del mundo. Pues bien, para hallar el índice de viscosidad de un aceite dado, se toma un aceite de Pensilvania, dándole un índice 100 (son los aceites de menor variación de viscosidad con la temperatura), y un aceite del Golfo Pérsico, asignándole un índice O (aceites de la mayor variación viscosidad-temperatura), cuyas viscosidades a una determinada temperatura fuesen iguales a la del aceite a examinar. A continuación se comparan las viscosidades de los tres aceites a 37,8 °C (100 °F), y de esta confrontación se obtiene el índice de viscosidad.
La finalidad de este índice consiste en señalar la variación de la viscosidad de un líquido con los cambios de temperatura. Si un líquido se hace muy viscoso a temperaturas bajas y muy fluido a temperaturas altas, posee un índice de viscosidad muy bajo (varía mucho la viscosidad). Por el contrario, cuando la viscosidad de un líquido se mantiene casi inalterable con los cambios de temperatura, su índice es muy alto (varía poco la viscosidad).
Diferentes estudios y muchas experiencias prácticas han demostrado que los aceites minerales empleados en los circuitos hidráulicos son óptimos si su índice de viscosidad no es inferior a 75.
En el mercado existen una serie de aceites hidráulicos, de marcas acreditadas, propios para circuitos hidráulicos. Es aconsejable emplear siempre el que recomienda el constructor y si, por cualquier circunstancia, hubiera que cambiarlo (cosa no recomendable), es necesario limpiar muy bien todo el circuito, pues al mezclar dos aceites diferentes se puede producir una reacción química que los deteriore.
Los aditivos químicos, así como las técnicas de refinado, han conseguido aceites con índices de viscosidad superiores a 100. Si se trabaja con variaciones de temperatura conviene utilizar un LV. de viscosidad elevado, pero si la máquina funciona a temperatura casi constante el índice de viscosidad carece de importancia.
Punto De Fluidez
El punto de fluidez es la temperatura más baja a la que un líquido puede fluir. En un aceite hidráulico, la comprobación de esta especificación tendrá una gran importancia cuando su utilización se produzca a temperaturas muy bajas. Como regla, el punto de fluidez suele estar 1O°C por debajo de la temperatura más baja de utilización.
Capacidad De Lubricación
El ajuste entre las partes móviles de un sistema hidráulico debe permitir el suficiente juego como para que entre los materiales exista una capa de fluido. Si el aceite tiene una viscosidad adecuada se podrá evitar que las imperfecciones de las superficies metálicas contacten. Cuando la presión de trabajo es muy grande, las holguras muy pequeñas, o las velocidades altas, la película de fluido se hace más delgada, pudiendo existir contacto metal-metal. Se hace necesario añadir aditivos para lograr un aceite con propiedades químicas especiales.

Resistencia A La Oxidación
Los aceites derivados del petróleo son muy susceptibles a la oxidación, el oxígeno atmosférico del aire disuelto en el aceite se combina fácilmente con el carbono e hidrógeno. Los productos en contacto con el aceite pueden ser solubles o insolubles en él. En ambos casos producen consecuencias perjudiciales.
Los productos solubles producen reacciones que forman goma o Iodos que, por su acidez, pueden provocar la corrosión del sistema a la vez que aumentan la viscosidad del aceite.
Los productos insolubles taponan los orificios, aumentan el desgaste (actúan de abrasivos), haciendo que las válvulas se agarroten.